- Después de pasear por el casco histórico de Cuenca, Felipe y Letizia han puesto rumbo a la costa de Levante para apoyar la reactivación del turismo.
- Durante su visita a Benidorm, han paseado por el paseo marítimo, se han interesado por sus vecinos y sus negocios.
Los Reyes continúan con su gira por territorio nacional para reactivar el turismo en nuestro país tras la crisis provocada por el COVID-19. Esta vez le ha tocado a la costa levantina y la primera parada ha sido en Benidorm, una de las capitales mundiales del turismo, donde, nada más llegar, Felipe y Letizia se han reunido con sindicatos y empresarios de la zona. Después de la reunión, para conocer el impacto económico que la crisis ha tenido en esta ciudad, han paseado por el Paseo Marítimo donde han visitado algunos negocios. Además, se han acercado a los vecinos y han estado sin mascarilla siempre que se ha podido mantener la distancia de seguridad.
Una de los negocios a los que se han acercado ha sido una heladería y su propietario, Alberto, ha comentado que le han preguntado por el negocio. "Me preguntaron por la situación actual y les hemos dicho que tuvimos dos meses muy malos y que ahora empezamos a ver una pequeña mejora. Han preguntado por los helados sin azúcar y el Rey ha probado el del turrón sin azúcar", contó en 'Ya es mediodía'. Bien es sabido que doña Letizia cuida mucho su alimentación y siempre está preocupada por la alimentación saludable.
Doña Letizia ha vuelto a apostar por su look fetiche para estos días de verano: vestido midi y alpargatas. Es la combinación que ha elegido para pasear por el paseo marítimo de Benidorm y ha tirado de fondo de armario. La Reina ha rescatado el vestido de Adolfo Domínguez, de la línea U, que estrenó el pasado verano durante el tradicional posado de la Familia Real en el palacio de Marivent. Es un modelo sin tirantes, con estampado de grandes flores en diferentes tonos de rosa que ha combinado por unas alpargatas de cuña muy parecidas a las que ya lució en Cuenca con su mono de Mango.