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Este domingo Roma se ha vuelto a convertir en el epicentro del mundo después del funeral del Papa Francisco. Esta vez, con motivo de la celebración de la misa que da comienzo al pontificado de León XIV y donde se han reunido más de 200 delegaciones internacionales formadas por monarcas, Jefes de Estado y representantes de las delegaciones internacionales. La reina Letizia, con un diseño 'made in Spain' de 'Redondo Brand', se ha convertido en una de las Reinas católicas que han llevado de manera más elegante a la par que sofisticada el 'Privilège du blanc'.
Un concesión de protocolo al alcance de muy pocas 'royals' europeas y de la que no ha tenido el privilegio de hacer uso Máxima de Holanda. Quizás el vestir completamente de negro y sin la compañía del rey Guiillermo, hayan hecho que la presencia de la reina Máxima casi haya pasado desapercibida.
Máxima de Holanda, la Reina católica que no puede hacer uso del 'Privilège du blanc'
La mujer del rey de Holanda no pudo hacer uso del privilegio de vestir de blanco de las Reinas católicas a pesar de profesar esta religión, pues el rey Guillermo practica el protestantismo. Algo que, aunque nunca ha sido un impedimento para su amor y que el Rey de los Países Bajos aceptó sin problemas el día de su matrimonio, pero que le deja fuera porque su Corona no profesa la fe católica.
Cuando en febrero de 2002, Máxima Zorreguieta se dio el 'sí, quiero' con el por aquel entonces príncipe Guillermo de los Países Bajos, lo hizo bajo el protestantismo pero bajo un matrimonio mixto, pues la argentina sigue practicando la fe católica.
Unas convicciones religiosas de su mujer de las que el rey Guillermo siempre se ha mostrado muy orgulloso e incluso al inicio del pontificado del Papa Francisco acompañó a Máxima a la misa inaugural. Sin embargo, en esta ocasión, no le ha ha podido acompañar.
Al no poder vestir de negro, la reina Máxima de Holanda se ha decantado por el negro, tal y como señala el protocolo. Con una blusa de seda de manga largo, una falda de tuvo, salones negros y mantilla negra de flores.
