- La estrecha relación de Kiko Hernández y María Teresa Campos
- El colaborador acusa a Carmen Borrego de no haber apoyado suficiente a su madre
Kiko Hernández ha terminado estallando contra Carmen Borrego tras ver cómo ella negaba tener una comunicación fluida con el colaborador. La hija de María Teresa Campos acusó a Kiko Hernández en 'Viva la vida' de haber insistido en quedar a comer con su madre, e incluso ha reconocido que ya está cansada de que le llame 'Potota'. El colaborador ha mostrado su asombro tras escuchar todas estas declaraciones y ha asegurado que Carmen Borrego es "una mentirosa de libro" y ha indicado que le va a cambiar el mote por el de "embustera".
El colaborador ha aclarado que él sí que ha mantenido largas conversaciones con Carmen Borrego y ha decidido enseñárselas a Jorge Javier para que pudiese corroborar que estaba en lo cierto. Además, ha querido dejar claro que él no fue el que le propuso a María Teresa Campos quedar para comer. "Yo llamé a una amiga y ella cogió el teléfono para invitarme a su casa", ha recalcado.
En cuanto al mote de 'Potota', Kiko Hernández ha indicado que esa es una broma que tenía con ella desde hace mucho tiempo y que Carmen Borrego siempre se lo había tomado con humor. Un punto de vista con el que parece no estar de acuerdo la colaboradora de 'Viva la vida'. La hermana de Terelu Campos llegó a decir que "no es una gracia y no es necesario humillar a las personas".
El colaborador ha dejado claro que esa nunca ha sido su intención y que si su intención fuese humillarla lo habría hecho "enseñando todas las conversaciones que han tenido". Además, ha aprovechado para acusarle de no haber estado junto a su madre después de haber vivido unos días complicados tras su enfrentamiento con Jorge Javier. "Nunca había visto tanta soledad. Vendes a tu madre por dos duros, Yo le tengo mucho más respeto que tú", le ha recriminado.
Además, Kiko Hernández ha querido recordarle a Carmen Borrego que ella y él sí que tenían una buena relación. De hecho, ha confesado que ella también iba a ir a su casa a comer, pero que finalmente no pudo. "¡Qué asco, qué mentirosa eres, tía!".
