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Ser famoso y llevar una vida aparentemente de lujos no significa que uno esté forrado, y un buen ejemplo de ello es Pelayo Díaz, que fue el primer concursante confirmado de 'Supervivientes 2025'. El influencer de moda ha colaborado con firmas internacionales, es imagen de importantes marcas y tiene ropa y bolsos que cuestan el salario anual de una persona corriente, pero, a juzgar por lo que se ha conocido en las últimas horas, no le llega para todo. Tras adquirir hace unos años el apartamento de sus sueños en el centro de Madrid y ponerlo a su gusto, el asturiano acaba de comprarse otro piso en París, ciudad a la que viaja con asiduidad, pues allí trabaja su novio, Gal Marom. Un importante desembolso que le ha dejado 'a dos velas', y precisamente la falta de dinero es lo que le habría hecho pasar recientemente por 'MasterChef Celebrity' y ahora por Honduras.
Ha sido su ex Andy McDougall, y defensor en el plató de 'Supervivientes' el que ha desvelado lo que piensa hacer Pelayo con el dinero que gane en el concurso pasando penurias, o incluso con el premio final si consigue alzarse victorioso: "Quiere ser padre. Es verdad que él en un momento dijo 'quiero dinero para ser padre'. (Tener una buena economía) es muy necesaria, porque traer un hijo al mundo no es gratis", afirmó este jueves ante los micrófonos de Europa Press en un acto organizado por la marca de coches Kia.
Pelayo Díaz, 'Supervivientes', en el centro de la polémica tras expresar su deseo de ser padre
El influencer, a sus 38 años, ya está preparado para tener descendencia, pero aunque no dijo ni cuándo ni cómo, muchos se echaron encima de él en redes sociales tras bromear diciendo que le faltan "unos euros" y pidió "suelto" a Marta Riesco en 'Ni que fuéramos'. Podría referirse a la gestación subrogada, una opción que han elegido muchos famosos para poder ser padres solteros, o a la adopción, dos procesos que no son nada baratos, pero hubo quienes interpretaron que se refería a la primera opción sin él haberlo expresado, y que no es legal en España. Incluso la ex ministra Irene Montero salió a la palestra para avisar: "La explotación reproductiva no es legal en España y está reconocida como una forma de violencia contra las mujeres. Decir entre risas 'me faltan unos euros, si tienes suelto' es una forma insoportable de banalizar la violencia y vulneración de derechos de mujeres e infancia".















