Te contamos cómo es y cómo fue realmente la relación de Rocío Carrasco y Ortega Cano
Rocío Carrasco y José Ortega Cano no siempre se han llevado como el perro y el gato. De hecho se llevaron muy bien al principio, pero su mala relación llegó años después.
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Rocío Carrasco y José Ortega Cano no siempre se llevaron mal. De hecho, hubo un tiempo en el que se llevaron hasta bien. Se querían, incluso. Y eso ninguno de los dos puede negarlo a la luz de los actos y las instantáneas que han protagonizado desde que el torero llegó a la familia y se casó con Rocío Jurado años después de que ésta se divorciase de Pedro Carrasco. Ese hecho no impidió que ambos mantuvieran una buena relación, y la propia Rocío lo explicó en la segunda parte de su docuserie: "Yo con José tuve siempre, y sobre todo al principio, una relación maravillosa. Nunca lo vi como un rival de mi padre, lo vi como la persona que mi madre quería. Era un tío simpático, agradable, le gustaba lo mismo que a nosotros, el cante, el baile... yo me llevaba muy bien con él". Así, se pudo evidenciar esta unión sobre todo en los peores momentos de la vida de ella (la muerte de su padre y de su madre), cuando el torero la arropó de principio a fin. Sin embargo, diferentes episodios se fueron sucediendo hasta que la situación fue cambiando como del blanco al negro.
La guinda del pastel de esta relación fueron las últimas declaraciones de Rocío Carrasco sobre su padrastro en su documental donde incluso asegura que su madre Rocío Jurado quería separarse de Ortega Cano. La hija de 'La más grande' ha asegurado que ya no quiere que Ortega Cano ni sus hijos, Gloria Camila y José Fernando, formen parte de su vida. Sin embargo, también ha afirmado que 'no deja de herirle' porque a José 'siempre le tuvo mucho cariño y afecto'.
Lo que parece claro, teniendo en cuenta las propias palabras de la colaboradora televisiva, es que el diestro ya no forma parte de su círculo, y así lo dijo Rocío Carrasco tajante: "No quiero que pertenezca a mi vida". Pero, ¿por qué Rocío ha tomado esta decisión tan rotunda? Según ella, ha sido por culpa de su ex marido, Antonio David Flores, al considerar que ha distanciado a Ortega Cano y a sus hermanastros de ella. Y ahora, debido a la unión de su familia con Antonio David, Rocío Carrasco ha decidido alejarse de ellos: "No es que ya no le tenga afecto, es que no quiero que pertenezca a mi vida", aseguraba con pena.
Mientras tanto, Ortega Cano aseguraba que estaba "muy tranquilo" ante las declaraciones de Rocío Carrasco. Lo cierto es que la guerra familiar está ahí y que la decisión de Rocío de hablar después de más de veinte años de silencio ha hecho tambalearse aún más a la familia. Y es que la hija de 'La más grande' ha hablado de todos y cada uno de sus familiares y ha desvelado por qué está alejada de todos ellos.
La gran confesión sobre su madre
En su nuevo documental, titulado 'En el nombre de Rocío', Rocío Carrasco ha contando detalles de la vida de Ortega Cano y su madre en los que le torero no sale bien parado. Según ella, su madre no debió casarse con el torero. Es más, asegura que de no haber adoptado a Gloria Camila y José Fernando, su madre se habría separado.
El momento en el que todo cambió
Ortega Cano nunca tragó a Antonio David, a diferencia de lo que pasó años después, y fue durante una entrevista del 'ser' en el programa 'Salsa Rosa' en 2003 cuando las cosas subieron de nivel. "José también sufre en sus carnes lo que sufría mi madre y lo que sufría yo. Él también lo vive y tampoco está de acuerdo y tampoco lo puede ver", recordó Rocío.
Antonio David seguía en su cruzada contra Rocío y toda la familia tras su divorcio, y el torero estalló entrando por teléfono, asegurando que "le fuiste infiel y todos lo saben" e incluso le acusó de que "la maltrataste".
Antonio David cortó de raíz aquello en pleno directo: "Acaba de abrir la caja de Pandora, maestro. ¿Quiere usted que cuente cómo fue la adopción de esos niños?", dijo el ex guardia civil, a lo que Rocío reaccionó en su docuserie: "Yo no sé si pasó algo en la adopción, sé lo que él le dice y con lo que él lo amenaza, y causa efecto, porque nunca más".
Una familia rota
Rocío Carrasco se abrió por primera vez y como nunca con su documental 'Rocío contar la verdad para seguir viva'. Contó que uno de los peores momentos de su vida fue cuando se vio obligada a romper toda relación con sus hijos, sus hermanos y su familia. Según asegura en el documental, la culpa de este distanciamiento es de su ex marido, Antonio David Flores, que tanto daño asegura que le ha hecho. Y también ha dejado claro que no tiene relación con Ortega Cano porque se ha posicionado con su ex. Sobre el torero fue tajante: ''No quiero que permanezca en mi vida''.
Como un segundo padre
La mala relación no fue siempre así entre Ortega Cano y Rocío Carrasco. Y es que desde que Rocío Jurado se separó del boxeador Pedro Carrasco, lejos de tener una mala relación con Ortega Cano, éste se convirtió como en un segundo padre para Carrasco. La relación entre padrastro e hijastra se consolidó todavía más cuando murió el padre de ella en 2001.
El torero, muy unido a sus nietos
Cuando Rocío Carrasco fue madre en 1996 por primer vez, y en 1998 por segunda, tanto Ortega Cano como Rocío Jurado ejercieron de abuelos felices y muy entregados a los nietos, como se puede observar en esta fotografía. Porque sí: el torero también cumplió como 'abuelo', aunque fuera postizo. La buena relación sigue a día de hoy.
Los buenos momentos
La relación con Rocío Carrasco y su hija, y Rocío Flores, no siempre fue mala. De hecho, siendo la niña pequeña y estando ellos todavía casados, vivieron momentos unidos en familia, como se observa en esta imagen. Pero lejos quedan ya esos años felices donde los tres eran una familia, aunque a costa de mentiras, manipulaciones, amenazas y luz de gas, según reveló Carrasco en su docuserie.
Un matrimonio fallido
Rocío Carrasco vivió una intensa relación con su ahora ex marido, Antonio David Flores, siendo ambos muy jóvenes. Cuando la pareja se casó en 1996 ella tenía 18 años. Ese mismo año tuvieron a su hija en común, Rocío Flores. Pero en 1999 el matrimonio llegó a su fin. Aunque firmaron de mutuo acuerdo, la relación se tensó mucho durante esta separación, especialmente por los dos hijos que tenían en común, los pequeños Rocío y David.
A Ortega Cano, igual que los padres de la joven, no le gustaba especialmente esa relación.
Un enlace histórico
La boda con Antonio David cambió la vida de Rocío Carrasco y la de todo su alrededor, para su desgracia. Ese 31 de marzo de 1996 se celebró en la ermita Las Vírgenes de Yerbabuena, un enlace histórico que terminaría tres años después.
Jurado, en contra de la boda
El día de su boda, Rocío Carrasco estaba embarazada de dos meses, lo que precipitó el enlace. Sin embargo, Rocío Jurado nunca apoyó ese matrimonio, como confesó años más tarde al revelar que ese día hizo de tripas corazón para ver feliz a su hija.
Rocío Jurado, su mayor amor
Si ha habido una persona importante en la vida de Rocío Carrasco ha sido su madre, Rocío Jurado. La única hija biológica de la tonadillera pasó toda su vida muy unida a su madre. Así se observa en esta instantánea, donde madre e hija se muestran muy cariñosas en la boda de Rocío Jurado con Ortega Cano.
Disfrutaron de felices momentos
Mientras Rocío Jurado vivió, ella, su marido José Ortega Cano, y su primogénita, Rocío Carrasco, también disfrutaron juntos de felices momentos.
Muy unidos en la enfermedad
El torero y su hijastra mostraron estar muy unidos incluso en los peores momentos durante la enfermedad de Rocío Jurado. Juntos, la arroparon hasta el final, como en esta fotografía a la salida del hospital.
Momentos felices
Tras el divorcio entre su madre, Rocío Jurado, y su padre, Pedro Carrasco, la hija de la 'La más grande' mantuvo una relación de cordialidad con el nuevo marido de su madre, el torero José Ortega Cano, con quien Jurado se casó en 1995. Ella aseguró que llegó a tenerle mucho aprecio, especialmente porque hizo a su madre feliz de nuevo tras su separación. Rocío Carrasco y Ortega Cano continuaron unidos también durante la juventud de ésta, quien fue además un gran apoyo para sus hermanos, Gloria Camila y José Fernando. Esta instantánea de 2005 en la comunión de Gloria Camila muestra la buena relación que tenía toda la familia.
Celebraciones felices
El clan Ortega-Mohedano también vivió buenos momentos mientras la de Chipiona vivió. Momentos que siempre celebraban junto a Rocío Carrasco y su entonces marido, Antonio David, como se puede observar en esta instantánea.
Ortega, un gran apoyo en el funeral de Pedro Carrasco
Rocío Jurado ya llevaba más de 5 años casada con Ortega Cano cuando su ex marido, el boxeador Pedro Carrasco, murió en 2001. Sin embargo, tras el fallecimiento, Ortega Cano fue uno de los mayores apoyos de Rocío Jurado y su hija, mostrando la buena relación que les unía en ese momento.
Primer hundimiento de Rocío Carrasco
El boxeador murió de un ataque al corazón en enero de 2001, y prácticamente toda su familia, y su chico -Fidel Albiac- se volcaron con ella para tratar de superar esos difíciles momentos. Ortega Cano, por supuesto, también fue un pilar fundamental para la joven.
Juntos en Houston
Rocío Jurado pasó parte del final de su enfermedad ingresada en un centro oncológico de Houston, la clínica Anderson, en 2006. Hasta allí se desplazaron su hija, su novio, Ortega Cano e incluso la hermana de la cantante, Gloria Mohedano, y su cuñada, Rosa Benito. El torero y la hija de 'La más grande' se apoyaron mutuamente en los duros momentos que Jurado pasó en Houston.
Segundo hundimiento de Rocío Carrasco
José Ortega Cano fue, una vez más, un apoyo imprescindible en otro de los peores momentos de la vida de Rocío Carrasco: la muerte de su madre. Tanto durante los meses previos a su fallecimiento, como en el funeral de Rocío Jurado, Ortega Cano estuvo al lado de su hijastra.
Rocío Carrasco vivió junto a Ortega Cano el peor momento de la vida de ambos. Por un lado, la única hija de la cantante perdió a su mayor apoyo, su madre. Por otro, el torero perdió al gran amor de su vida.
Juntos en la tragedia
Cuando falleció su madre, Rocío Jurado, el torero siempre permaneció al lado de su hijastra. Fidel, además, era el pilar fundamental para Rocío.
Antonio David, problemas con la familia
Desde entonces, el torero no volvió a meterse más en la guerra de la ex pareja, y es que, según reveló Rocío, la información privada que tenía Antonio David sobre la familia conseguía asustar al torero e incluso a 'La más grande', que a pesar de su carácter "se hacía pequeñita" con Antonio David.
Según la versión de Rocío Carrasco, 'el ser' siempre ha presumido de haber tenido una gran relación con su ex suegra, pero la tenía "amenazada", algo que se puede demostrar con la infame escena que se vivió en el programa 'Salsa Rosa' en 2003: "Ahora que llame la Jurado, que se va a cagar por las patas", se escuchó decir al ex Guardia Civil. "Es asqueroso, pero así la tenía. Es una amenaza, pero sabía que se lo podía permitir. Sabía que si ella tenía ese impulso de llamar, efectivamente se iba a cagar", apuntó Rocío en su docuserie.
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