Pensar en verano y en mantas al mismo tiempo parece totalmente incomprensible. Sin embargo, no hay nadie que no se haya arropado, aunque sea un momento, en las noches más fresquitas o en el salón, para protegerse del frío del aire acondicionado si hay otra persona que tiene calor.

Aunque lógicamente todos guardemos las mantas y los rellenos nórdicos cuando comienza el verano, también es cierto que todos dejamos una manta de esas de ‘por si acaso’ en algún punto estratégico del dormitorio o del salón. Y yo este año no quería ser impune a ello y tenía claro que la manta de ‘verano’ sería de buena calidad. Y que no me gastaría mucho.

Emme Manta de algodón

Manta de algodón
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Pensé que iba a ser tarea más complicada encontrar una que me encajase, pero por suerte di con una manta de muselina que es del todo gustosa, tiene el grosor perfecto para protegerme de ese frío de la madrugada y del aire acondicionado sin agobiar y, además, me ha servido para dar un toque más bonito a mi salón. ¿Lo mejor? Aunque a mí me costó 55 euros, acabo de ver que está rebajada a apenas 46 gracias a las ofertas del Prime Day de Amazon.

La manta que ha salvado mis noches de verano

Lo que más me gusta de esta manta, más allá de su color y su tamaño, es el tacto de muselina con el que está fabricada. Un tejido bastante en tendencia en 2025, que vemos, incluso, en fundas nórdicas. Una muselina de alta calidad hecha 100% de algodón, un material orgánico que protege del frío sin llegar a agobiar.

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Es precisamente ese algodón del que está hecha la que le da una ligereza perfecta para el verano: no pesa más de unos gramos, pese a sus 228 por 228 cm de diámetro y su suavidad al tacto no solamente la certifico yo, sino las más de 10.000 reseñas positivas que tiene en Amazon. Este hecho consigue que esta manta pueda utilizarse perfectamente como colcha de primavera y verano para una cama de matrimonio e, incluso, como un guardapiés, también para la cama.

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En mi caso, como digo, la tengo en el comedor, puesta justo en una butaca al lado del sofá. Y consigo que esté más bonito cada vez que la utilizo porque tiene un color beige que queda ideal con la estética entre rústica y mediterránea que he dado a mi casa.

Eso sí, también está disponible en otros 10 colores diferentes.