La llegada de la primavera supone un aumento de las horas de sol y eso supone más calor. Por este motvio, la piel sufre cambios y debes adaptar tu rutina de cuidados a este momento, para tener una piel bonita, sin brillos y saludable. Tras un invierno frío como el que hemos pasado, debes protegerte del sol porque, aunque estés deseando esas exposiciones solares ya sabes que el sol causa envejecimiento prematuro, manchas y agrava el acné. Por este motivo, debes usar el solar adecuado a tu tipo de piel y con SPF de 50. El solar debes reponerlo cada dos horas y, si vas en coche o en autobús, recuerda que los cristales aumentan los efectos nocivos del sol causando más daños y lo mismo si trabajas frente a una ventana. Además, puedes encontrar mis mejores consejos y tips para cuidar tu piel en mi consultorio de belleza y analízala gracias al diagnóstico on line.

    En primavera, puedes sentir la piel mas grasa y brillante debido a que la piel ante las exposiciones del sol pierde la capacidad de retener el agua de la piel y se queda la grasa. Además, el calor activa la glándula sebácea produciendo más grasa y obstruyendo el poro, dejando la piel mas propensa al acné, a la formación de comedones y puntos negros y a los brillos en la piel, siendo más visibles en la parte central del rostro.

    acné verano
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    El acné también se agrava en primavera no solo por la mayor producción de sebo y por el taponamiento de los poros sino también por el uso de cremas solares no adecuadas a tu tipo de piel. El calor y la humedad también agrava los casos de rosácea por lo que en ese caso, debes evitar las fuentes de calor, como las exposiciones al sol directas que generan la dilatación de vasos sanguíneos aumentando las rojeces de la piel.

    una chica joven se limpia la cara
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    En cualquier tipo de piel debes reforzar los buenos hábitos. El principal es la rutina de limpieza, que tienes que hacer mañana y noche con productos respetuosos con la piel como leches calmantes, con activos vegetales, que sean suaves si tienes piel seca y sérum de vitamina C y ácido hialurónico para aportar antioxidantes y agua a la piel y algún jabón con activos desinfectantes, tónicos astringentes y cremas en textura gel en caso de acné y, en el caso de rosácea, debes usar protocolos adecuados asesorados porque esta patología es complicada y cuando se desequilibra el ácaro demodex se descontrola agravando la situación.

    Completa tu rutina diaria de cuidados faciales con una buena y correcta alimentación a base de frutas y verduras para alcalinizar tu organismo, las verduras aportan antioxidantes que son esenciales para tener una piel sana, jugosa, hidratada y sin exceso de grasa.

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    Ana Ruiz / HEARST

    Cuca Miquel, coach de belleza