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Raquel Arias es el ejemplo perfecto de que no todas las modelos pasan hambre para estar delgadas, si bien recientemente ha recibido críticas por su nuevo peso, y es que la ex concursante de 'Supervivientes' mantiene su cuerpazo comiendo como le apetece. Sin embargo, durante el concurso no ha escondido que ha pasado mucha (MUCHA) hambre, y ahora que ha sido expulsada y está fuera ha confesado que precisamente ese hambre le ha llevado a tener que llevarse a la boca cosas que jamás hubiera imaginado. Sabía que, cuando llegara a Honduras, iba a tener que comer lapas, ermitaños, erizos... pero lo que no se imaginaba era que se le iba a pasar por la cabeza comerse una cucaracha... o hasta pasta de dientes.
Pues sí, Raquel Arias ha confesado ahora que se ha llegado a comer el dentífrico que el programa da a los concursantes para que, al menos cuiden su higiene dental: "Yo tenía muchísima, muchísima hambre... y me comía la pasta de dientes. Antes de dormir y al mediodía", ha revelado entre divertida y un poco avergonzada. La desesperación por comer algo es tal que hasta lo que no deberían, se lo comen, y en cuanto agarraban alguna fruta que sí era comestible, se podían tragar hasta las pieles: "Cuando hacíamos las pruebas nos daban medio plátano, y yo me comía hasta la cáscara. Rebañábamos la parte de dentro de la piel, y luego yo me comía la cáscara. La mía y la de mis compañeros. Y la piel de la naranja cuando me tocó el desayuno también me la comí. Me lo comía todo", ha confesado en un 'preguntas y respuestas' de Instagram.
La ex superviviente también ha querido contar que su paso por la isla ha sido complicado -a pesar de que se ha entretenido mucho con su tonteo con Bosco-, ya no sólo por la falta de comida, sino porque ha sufrido lo mismo que muchas otras mujeres que han pasado por el reality: se le retiró la menstruación -un problema de salud que han apuntado otras ex concursantes como Lola Mencía-, y es que con la falta de comida, el cuerpo se pone en modo 'supervivencia' y no se puede 'permitir' ovular. Por otro lado, Raquel ha confesado que tiene "el cuerpo fatal", y que va a tener que ir a un fisio para que le arregle de arriba a abajo: "Estoy fatal de la espalda, los dedos los tengo un poco estropeados...", unas contracturas por dormir en el suelo, como Anabel Pantoja, a las que también hay que sumar sus problemas digestivos y la retención de líquidos. Consecuencias de las que, poco a poco, espera ir recuperándose.
