- El marido de la infanta Cristina regresa a su trabajo como voluntario en el Hogar Don Orione después de que un brote de coronavirus en el centro cancelara el programa por prevención.
- Mientras Iñaki continúa en prisión, su familia, con la hija del rey Juan Carlos a la cabeza, disfrutó de unos días de vacaciones en Bidart con la familia Urdangarin.
Iñaki Urdangarin vuelve a la 'normalidad'. El pasado 2 de septiembre, el marido de la infanta Cristina pudo volver a salir de la cárcel de Brieva, en Ávila, para retomar su labor como voluntario. A principios de agosto, Iñaki tuvo que dejar de acudir al Hogar Don Orione, en Pozuelo de Alarcón, Madrid, después de que se produjera en sus instalaciones un brote de coronavirus. Urdangarin se sometió a las pruebas, que dieron negativo, pero se suspendieron las visitas y el trabajo de los voluntarios hasta nueva orden.
El marido de doña Cristina ha vivido un verano movidito porque, el pasado 17 de julio, Instituciones Penitenciarias rechazó concederle el tercer grado, lo que le hubiera permitido obtener un régimen de semilibertad. Tras un nuevo recurso, el tribunal le ha concedido el tercer grado, pero esta alegría se ha visto empañada por la decisión de la Fiscalía.
La Fiscalía de Valladolid se opone a la semilibertad de Urdangarin al considerar que "denota una evolución favorable pero entendemos que no suficiente para su progresión" y que el marido de la infanta Cristina no ha cumplido todavía ni la mitad de su condena. Fiscalía aclara que Iñaki Urdangarin "no es un delincuente al uso" y que concederle el tercer grado generaría alarma social, puesto que por los delitos que cometió tiene "cotas muy superiores de desvalor respecto a la ejemplaridad e integridad socialmente esperadas".
Mario Pascual Vives, su abogado, se pronunció sobre la concesión del Tercer Grado y ya preveía lo que iba a ocurrir. "Tardará porque la Fiscalía recurrirá, lo llevo diciendo desde hace años", dijo y añadió que su cliente está encantado con su labor de voluntario en Don Orione. "Le gusta mucho ir ahí. Si se lo conceden estará trabajando en Don Orione constantemente e irá a dormir a la cárcel, qué curioso que unos lo tengan y otros no", señaló, evidentemente molesto. "Podría decir muchas cosas pero llevo nueve años así y es mejor que no las diga", añadió. Al parecer, a Diego Torres le han denegado el Tercer Grado y Pascual Vives teme que a Urdangarin también se lo denieguen.
Con el brote controlado, Iñaki ha podido retomar su labor en Don Orione, labor que le gusta mucho como ha confesado su abogado, y como podemos ver en el vídeo sobre estas líneas. Vestido de manera informal y con la mascarilla, Urdangarin llegaba al centro a primera hora de la mañana.
Con pantalón corto y una chaqueta de chándal para soportar las temperaturas frescas de primera hora, Iñaki llegaba al Hogar Don Orione con su inseparable bolsa de Ecoalf, una firma española de moda sostenible, en la que se puede leer 'Because there is no planet B' (Porque no hay un planeta B). Tras cumplir con su trabajo como voluntario, volvió a prisión.