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Alejandra Rubio ha dado un paso muy complicado tras la muerte de su abuela, María Teresa Campos, al decidir que volver a la rutina le ayudaría a superar este difícil momento. La colaboradora de televisión e hija de Terelu Campos ha pasado unos días muy tristes rodeada de su familia, y tras volver a su puesto en 'Así es la vida', este martes, quizá para tratar de despejarse, tenía en su agenda un compromiso al que tampoco ha querido faltar: el desfile de la firma SKFK en Madrid. Sin embargo, no lo ha hecho sola, y es que una persona muy especial le ha acompañado en todo momento, sirviéndole como apoyo y devolviéndole la sonrisa.
La joven influencer quiso acudir al acto junto a una persona que ya creíamos desaparecida de su vida, y no es otro que su ex Carlos Agüera. A pesar de que ambos rompieron a principios de año, y de que a ella se le relacionó con el futbolista del Getafe CF Carles Aleñá el pasado abril, los dos parecen mantener una bonita amistad, y a juzgar por las fotos del desfile, parece que de lo más íntima. De momento desconocemos si sólo son dos ex muy bien avenidos o si el tiempo les devolverá el amor, pero desde luego está claro que están de lo más a gusto, y es muy llamativo que sea él en quien Alejandra haya decidido apoyarse en uno de sus momentos más complicados. También vimos a Carlos entre los asistentes al entierro de María Teresa Campos.
Decidida a pasar página, Alejandra respondía a las preguntas de los medios allí presentes y, a la vez que dejaba claro que ella está bien, reconocía que su madre sigue "fastidiada, como es normal". Por otro lado, no ha querido seguir dando bombo a las polémicas que ocurrieron en el funeral de su abuela, como la gente que se acercó a llevarse algunas flores de las coronas que les enviaron: "Ya está. No pasa nada. He dado las gracias a todo el mundo, ha sido muy importante esa gente anónima que se ha acercado", zanjaba.
