Los duques de Cambridge han viajado hasta Irlanda y se trata de una visita muy especial, ya que es la primera vez que un miembro de la Familia Real Británica visita este país desde que Reino Unido abandonará el pasado 31 de enero la Unión Europea. Esta es la segunda gira que realiza un miembro de la casa real británica a este país desde su independencia. La primera en hacerlo fue la reina Isabel II en 2011.
Durante su periplo por el país vecino, tanto el príncipe Guillermo con su mujer, Kate Middleton, están dando muestras de cercanía y simpatía en todos los actos a los que asisten.
Está llamando la atención los constantes guiños a la población irlandesa que Kate está haciendo con sus estilismos al usar el color verde en muchos de sus looks. Y es que este color es el que representa al país por su frondosa y característica vegetación.
Tras varios actos oficiales en Dublín, los duques han volado en helicóptero a la ciudad de Galway, en la costa oeste de Irlanda, y Kate ha vuelto a apostar por el verde como ya ha hecho en los días anteriores.
En esta ocasión ha llevado un bonito vestido verde y vuelve a llevar un estampado de topos en la líneas del vestido de ayer con el estampado de lunares que le vimos el día anterior y que tanto recordó a Lady Di.
El vestido lo ha combinado con unas botas altas en color negro que combinaban muy bien con un coqueto cinturón negro con hebilla dorada.
Durante los actos en Galway, los duques se han mostrado muy cómplices y no han parado de intercambiar miradas y sonrisas durante todo el día.
Como no podía ser de otra manera, en su día en Galway han visitado un típico pub irlandés y allí se han sentado con otra pareja que tenía un bebé y un grupo de músicos.
Ya otro día en Irlanda durante una reunión que dejó una divertida anécdota y es que los duques de Cambridge han aprovechado el viaje para disfrutar de uno de los grandes placeres de la tierra de Irlanda: la pinta de cerveza. Ambos acudieron a una taberna en la que disfrutaron de esta bebida con una amplia sonrisa divirtiéndose con sus anfitriones.
Sobre todo Kate Middleton que con un lujoso vestido verde, guiño a Irlanda, brindó por el país.
Los duques llegaron a Irlanda con el objetivo de esta visita es estrechar lazos con el país y normalizar la situación entre Londres y Dublín.
Para forjar esa amistad, Kate Middleton ha apostado por el estilismo que mejor podía elegir. La duquesa ha hecho un guiño al país con su total look verde de dos piezas y un abrigo de los mismos tonos. Kate ha dejado a un lado una de sus marcas preferidas, Zara, para esta ocasión. La hemos podido ver con un abrigo color verde botella muy estiloso. Una pieza de corte midi, hombros estructurados, solapas frontales y doble botonadura obra de Catherine Walker.
El look protagonista se basaba en un vestido estampado perteneciente a la colección primavera-verano 2020 de Alessandra Rich. Posee cuerpo decorado con un tableado que se entalla a la cintura y crea un favorecedor péplum con efecto cintura de avispa.
Cuenta también con mangas abullonadas, una de las tendencias clave de los últimos meses y cuello perkins con adorno de botones-joya que bajan hasta el pecho. Ha rematado con diadema de terciopelo ancha, bolso de mano tipo sobre de L.K Bennet y salones clásicos de ante de Emmy London.
Los duques han mantenido la sonrisa en todo momento. Se nota que han estado muy cómodos en este viaje, incluso se les ha podido ver con gestos cariñosos como el de Kate con un perrito o agarrada del brazo de la anfitriona.