Con los Soler no se juega, ‘Servir y proteger’

Para su desgracia, Sara descubre que Silvia y Álvaro están juntos y se hunde. Al enterarse, Luis le recomienda que hable con su hermano para solucionar su malestar. “No creo que lleve a ningún sitio. Él parece quererla. Yo no tengo nada que hacer”, asegura la mujer a su jefe.

Días después de salir de la clínica de desintoxicación, Ricky se embarca en un operación contra Nano Morales y acompaña a su hermano mayor, que está al frente de todo.

Los Soler intentan acabar con la vida del delincuente atropellándolo en la calle cuando conduce su moto.

Aunque la policía ha comenzado a investigar el incidente, Elvira comunica a su enemigo que sus hijos han sido los autores del incidente. “Y podemos llegar más lejos si no colaboras y cedes a nuestros deseos”, lo amenaza. Más tarde se reúne con Luis y lo presiona para que los Morales no cobren los beneficios.

Elías no se siente preparado para mantener una relación sentimental con nadie y miente a María para evitar salir a bailar con ella por la noche, algo que encaja muy mal la dueña de La Parra.

En una situación parecida se encuentra Paty, que ha descubierto a Olga y a Tony besándose de manera apasionada. La joven está tan afectada, que se plantea dejar su trabajo en el barrio e irse a vivir a Barcelona. “Me siento totalmente traicionada por vosotros dos, sobre todo por ti, a quien consideraba mi mejor amiga”, le dice muy dolida a la hija de Miralles, que se queda desolada y sin palabras.

Espe no puede creer lo que está pasándole: no le ha venido la regla y sospecha que puede estar embarazada de Pablo, situación que la desconcierta mucho. “No es el mejor momento para tener un hijo”, reflexiona la agente.

Inesperadamente, el malvado Konchalovsky aparece en el despacho de Quintero para hacer negocios con él. Tras llegar a un acuerdo, el ruso le comunica dónde tiene que hacer una entrega pero su objetivo es tenderle una trama y atraparlo.

Por su lado, Pablo no puede vencer su pulsión homicida y ataca a Ibarra en plena calle. Ante la psicosis por el estrangulador, la policía trata de dar con unas patrullas ciudadanas que quieren darle caza.