Duro reencuentro; ‘Servir y proteger’

Cuando parecía que Espe había tomado por fin las riendas de su vida, una visita inesperada amenaza con destruir su tranquilidad: se trata de Yoli. La mujer ha regresado a Madrid para someterse a unas pruebas relacionadas con su enfermedad cardíaca. Es la primera vez que la agente ve a su supuesta madre tras descubrir que podría ser un bebé robado.

Al día siguiente, la visitante obtiene los resultados de sus exámenes médicos y, al ver que todo está en orden, va a casa de su hija a mostrárselos. La policía intenta reunir el valor necesario para confesarle que ha estado investigando sobre sus verdaderos orígenes.

Después de su nuevo desengaño amoroso con Miguel, Sara ha decidido aceptar la oferta que le hicieron para cantar en un crucero y renuncia a su puesto en el Moonlight.

“Ha sido un placer reencontrarme con la gente que quiero, pero creo que es momento de partir y tomar otros caminos”, asegura al despedirse de sus amigos de Distrito Sur.

Por su parte, su exnovio recibe una seria amenaza de Rojo. “Si no vuelves a ser mi matón, el vídeo en el que sales dando una paliza a Torrecilla llegará a la policía”, le advierte el delincuente. El director del centro cívico del barrio no tiene más remedio que ceder ante el turbio chantaje.

En comisaría, Bremón se muestra muy contento con el regreso de Merche a su empleo. El comisario se hace ilusiones al creer que puede retomar su relación con su compañera, pero al proponérselo, la respuesta no es la que esperaba.

Tampoco le va bien en el amor ni en el trabajo a su hermano Mateo. Hasta su clínica de cirugía estética llega una muchacha llamada Rosa, que tiene sobrepeso y quiere que le haga una intervención de urgencia.

Al principio, el doctor accede, pero cuando revisa su historial médico y descubre que está en tratamiento psiquiátrico, se echa para atrás. “Considero que sería perjudicial para tu salud mental una operación tan grande”, explica. La paciente se toma bastante mal la noticia.