El regreso de Espe; ‘Servir y proteger‘

Tras el alta, Miralles recibe la noticia de la marcha de Salgado. “Te deseo lo mejor, compañero. Guardaré con cariño los recuerdos de este tiempo juntos”, se despide.

Por contra, una agente muy querida regresa a Distrito Sur. “¡Espe! Qué ganas teníamos de volver a tenerte por aquí”, la reciben en comisaría con emoción. En seguida, retoma su trabajo como directora de la UFAM

Cada día más alejada de Eva, Beatriz sospecha que ella está detrás de la muerte de Bruno y se plantea denunciarla. “Tranquila, le pondremos escuchas y así evitaremos que nos traicione”, promete Quintero a la mayor de las Velasco. Cuando Bea descubre que la espían, una nueva brecha se abre entre las hermanas.

Además, el empresario tiene otros planes. “¿Por qué no trabajas conmigo de nuevo? Podrías entrar en el negocio del tráfico de armas”, propone a Víctor, que finalmente acepta renunciando participar con Gabriel en el robo a la joyería.

La que no ve con buenos ojos esa alianza es Eva, y menos aún cuando la policía señala al antiguo hombre de confianza de su socio como sospechoso del asalto.

Con quien el dueño del Moonlight se siente cada día más a gusto es con María, a quien apoya durante el proceso del divorcio. “Siempre has estado a mi lado, Fernando. Eres un buen amigo”, se sincera la murciana sin imaginar que entre ellos está a punto de surgir algo especial, que pone en peligro su amistad de años.

La vuelta de Iván ilusiona a Lara. Sin embargo, las cosas no volverán a ser como antes.

“Le fui infiel, pero quiero estar con ella. La amo”, confiesa el policía a Carlos.

Mientras Espe descubre sus ganas de ser madre y habla con Antonio de un posible tratamiento, en comisaría, Carlos y Yolanda acercan posturas como binomio. Además, la agente se anima a hablar de su pasado con su compañero: “Mi marido se suicidó y yo caí en depresión”.

Más tarde, Paty llega con un nuevo caso: “Mi amiga Julieta ha encontrado en el ordenador de su novio fotos robadas de chicas. ¿Qué puede hacer?”.