Después de su detención, Clara no parece dispuesta a colaborar con la policía. Por mucho que los agentes le preguntan por su identidad y la relación que guarda con Argos, la mujer se muestra inaccesible. Está claro que sabe perfectamente cuál es su papel en toda esta trama y la necesidad de seguir callando y desea continuar viviendo. Carlos y Yolanda deben buscar una manera de obligar a la reclusa a cooperar con ellos.

    Por otro lado, Iker intenta disculparse con Luna, que está dolida por sus continuos plantones. El no saber cuál es el verdadero oficio de su amado y el por qué de sus constantes escapadas, le hace pensar a la dueña del Moonlight que sus sentimientos no son recíprocos. Temiendo perder a su “chica”, el agente del CNI sopesa contarle toda la verdad acerca de sus actividades y de quién es realmente. ¿Terminará revelando sus secretos?

    Una vecina llamada Adriana necesita ayuda

    Mientras tanto, Adriana, una vecina del barrio, intenta salvar su ONG mientras sufre serios problemas de salud. La complicada situación que está viviendo la mujer, hace que su segundo de a bordo en la organización, llamado Roy, cometa una locura, cegado por la desesperación. ¿Se convertirá el intento de evitar que cierren su ONG en su mayor error?

    Y por si fuera poco, Quintero encarga a Vega que investigue si Sonia Villalobos sigue viva. El hombre sospecha, a pesar de los intentos de Víctor de quitarle la idea de la cabeza, que la hermana de Hugo es quien está detrás de los ataques que ha sufrido.