Los Reyes de España exprimen cada momento durante sus vacaciones en Mallorca con sus hijas. Los planes familiares se combinan con los actos oficiales, como la tradicional recepción en el Palacio de La Almudaina, y este jueves Leonor y Sofía han disfrutado de una visita a la Casa Museo Son Marroig junto a sus padres. Situada en la sierra de Tramuntana, la que fuera propiedad del archiduque Luis Salvador de Austria está catalogada como Bien de Interés Cultural.
En esta Casa Museo, inaugurada en 1927, se pueden encontrar libros, dibujos y todo tipo de objetos que en su día pertenecieron al Archiduque. Entre las obras que decoran el interior de Son Marroig destacan las realizadas por pintores mallorquines como Antonio Ribas Oliver y Antonio Ribas Prats. Además, adquieren un lugar notorio las vitrinas con antiguos collares, objetos fenicios y cerámica de estilo griego y romano.
En esta cultural visita en la isla balear, la Familia Real se ha mostrado sonriente y divertida durante los agradables paseos por los jardines, demostrado ser una familia muy unida y dicharachera. Para el paseo, la Reina ha estrenado un vestido camisero de Uterqüe, que cuesta 99 euros, con cuñas de esparto, pendientes de Helena Nicolau y un bolso folk que estrenó en su visita a mercadillo de Pollença.
En su ruta han quedado fascinados con un templete jónico de mármol de Carrara, desde donde han sido testigos de unas vistas privilegiadas de la costa norte mallorquina.
En alguna ocasión, las pequeñas se han escapado del lado de sus padres y han descubierto juntas los misterios del lugar, adentrándose en la belleza de su paisaje y quedando asombradas a cada paso que daban. Ambas congenian a la perfección y se llevan de maravilla.
El Rey ha disfrutado mucho de este día en familia, y ha explicado a sus hijas cada recoveco del sorprendente lugar, metiendo de lleno a la Princesa y la Infanta en cada rincón que iban descubriendo.
Durante estas vacaciones, Felipe y Letizia han dejado a un lado la apretada agenda que inunda su día a día para adentrarse de lleno en el ocio y poder disfrutar de divertidos e inolvidables momentos con sus hijas, visitando la isla e inculcándoles la cultura a base de divertidas jornadas como la vivida en la Casa Museo de Son Marroig, la cual ha dejado relajadas y espontáneas fotografías de la Familia Real Española más allá del típico posado oficial en Mallorca durante sus tradicionales vacaciones estivales en el Palacio de Marivent.