Hoy en Servir y proteger, Yolanda se siente muy mal tras los últimos acontecimientos acaecidos en Comisaría. La joven agente siente que ha defraudado a su superiora y a ella misma, pues no ha actuado como le corresponde. Se ha dado cuenta de que su psicólogo tenía razón y no estaba preparada para volver al trabajo, por lo menos, sin ayuda.

    Finalmente, decide retomar la terapia que tan bien le hizo en un primer momento. Gracias a las diferentes sesiones, la chica encuentra el motivo por el que no puede avanzar y dejar atrás tanto dolor: todavía no ha olvidado a Iván y puede que pase mucho tiempo hasta que el recuerdo de su fallecido novio salga de su mente y de su corazón.

    Iris sigue acercándose a Isma

    Por otro lado, Iris sigue acercándose a Isma, como ya vimos en el capítulo de ayer de Servir y proteger, algo que no gusta para nada a Cata. La reclusa piensa en intervenir para evitar que la relación de amistad entre ambos vaya a más: «Estoy harta de verles siempre juntos». Mientras tanto, Saúl busca el dinero que le robaron a su tío Lorenzo para demostrarle que puede confiar en él más que en nadie.

    Cerca de allí, Julia atiene a las súplicas de Gael, que está muy preocupado por Isidro y decide hacerse cargo del caso del hombre. La abogada se convierte en la defensora del patriarca de los Galván, para alegría de este: «Me has devuelto la esperanza. Muchas gracias». Mientras tanto, un hostelero denuncia el robo de unas botellas de vino muy caras. Además, María y Néstor dudan sobre si celebrar su primer aniversario.